"Mini capítulo" 7

Todo el bendito camino a casa fue estresante para mí. Todos felices, menos yo.

Se quedaron el resto de la tarde en mi casa, ni siquiera estaba seguro de qué dia era ese, pero al parecer era fin de semana. lentamente al anochecer se retiraron los chicos y quedaron los Solé y mi mamá, papá se fué a casa de mi abuela, esa noche se había enfermado pero no me dejaron acompañarlo.

Mi mamá y los papás de Mary se quedaron en la sala y Mary entró a la cocina. recordé una pequeña charla que habíamos dejado inconclusa.

-Mary...- le dije.

-Si- volteó y me miró.

-Yo...- bajé la mirada- debí decirte antes mi problema, que...

-No, Joey. No es tu culpa,pero debiste decirmelo o almenos pedir ayuda a tus padres.

- ¡Es que no quiero!- le grité

-¿Qué es lo que no quieres?

- No quiero esto, no quiero vivir y tú me arruinaste mi plan...

-Joey...

-No, escucha Mary, debiste dejar que muriera, yo no tengo nada que hacer en este mundo...- tomé un cuchillo y me acerqué a ella- no debiste hablar con nadie- le apreté el cuello y la puse contra el refrigerador- ahora voy a silenciarte para siempre Mary, tú me arruinaste el plan.
Mis manos temblaban, y Mary hacia ademanes de querer hablar. Solté un poco mi agarre para permitirle que hablara.

-Hazlo- dijo sin ningun rastro de miedo o incredulidad en su voz, su rostro estaba sereno, pero serio, ella hablaba en serio.

-¿Cómo?- dije algo confundido.

-Hazlo- repitió- dale, "silénciame", prefiero morir antes de verte drogado otra vez.

Cuando dijo eso la solté y dejé caer el cuchillo, que resonó fuertemente al tocar el piso. ¿Qué diablos me sucedió? No puedo creer lo que había estado a punto de hacer...
Preocupar a mis seres queridos y quedar en coma era una cosa, pero había dejado que una estúpida adicción psicológica me llevara a tal extremo de querer matar a mi mejor amiga. Eso era demasiado, necesitaba ayuda.
Me tiré a sus piernas y lloré, ella se acuclilló y me abrazó.

-Lo siento mucho- dije mirándola a los ojos, a esos hermosísimos ojos azules que tanto conocía- realmente necesito ayuda.

-No te preocupes, No te vamos a abandonar, estaremos todos juntos en esto.

-Soy un idiota- en ese momento mi mamá entro a la cocina, junto a su mejor amiga y madre de mi mejor amiga.

-¿Qué sucede? escuhé un ruido.

-Es que... necesita ayuda-dijo Mary- y ahora accedió a la nuestra.

Mi madre se agachó y me dijo.

-Toda la que quieras, la puedes encontrar si primero quieres ayudarte a ti mismo.

Abracé a Mary y continué llorando sobre ella y luego regresó a mi mente las palabras que me dijo en el hospital y la abracé más fuerte. Mary, mi amiga Mary, le debo tanto...