jueves, 8 de abril de 2010

Entre felicidad y tristeza. Capitulo 3

Me dirigí a donde estaba y dejé mi mochila allí. Ella sonreía y le devolví la sonrisa, caminé hasta donde estaba Martin con las miradas de todos en mi nuca.

Me dio mi horario de clases y la profesora le devolvió a Martin el papel que yo le había entregado.

-Me preguntaba- le dije a Martin- si podría ir a mi casillero y… guardar los libros, no está muy lejos, supongo, es el 305 y…- tomé su mano y con la pluma que él siempre llevaba en su bolsillo le escribí una numeración- estos son los….

-17.08.21- me sonrió- está bien, iré con mucho gusto.

-Gracias- le dije- de verdad, muchas gracias.

-A la orden, niña…- dijo – paso por usted al finalizar su jornada, que le vaya bien.- dijo saliendo por la puerta.

-¡Martin!-le grité y se giró. Le saqué la lengua y él a mí.

Me giré a donde estaba la profesora y ella cerró la puerta. Ya no se veía tan molesta y me pude fijar en sus delicados rasgos, para tener sus años, estaba muy linda, su cabello era rubio cenizo y su ojo café. Tenía la piel muy tersa y no tan blanca, era más bien amarilla.

-Jovencitos- empezó a hablar- ella es Suzanne Faison, su nueva compañera y espero que la hagan sentir cómoda.

Me miró para que me presentara.

-Bien, como ya les dijo la profesora, soy Suzanne y bueno, este es mí primer año en una escuela y… -el escalofrío de nuevo- y… espero nos llevemos bien.

-Puedes tomar asiento.

Regresé a donde estaba Laury y vi que el chico que estaba sentado detrás de mí tenía el cabello muy negro. Lo miré un momento y me senté, era él, el chico desconocido de sonrisa macabra… macabramente perfecta y terriblemente linda…
Todo en él era extrañamente perfecto- al menos físicamente.
Me volteé para verlo otra vez más. Me pilló mirándolo, así que me giré y cerré los ojos fuertemente. Sentía sus ojos turquesa clavados en mi cuello, esperaba que en cualquier momento me jalara por las trenzas o que me las arrancara… exagero, pero eso sentí.

El bendito escalofrío seguía y casi no podía respirar… de pronto escuché un ¡Hola! De Laury, que me trajo de regreso a la realidad, abrí los ojos y la miré.

-¡Hola Laury!- le dije.
-jajá jajá- se rió- quedamos juntas.
-si, ¡qué bueno!- le dije.

La profesora nos miró y nos quedamos calladas. Era tan extraño estar allí, jamás en mi vida había tenido que pasar por eso, tantas personas en un solo lugar… era casi asfixiante.

-Como les decía chicos, esto es el sexto curso, el segundo año que tienen en AHS, dentro de dos más podrán estar preparados para la universidad, todos ustedes.
Yo, como dije antes, seré su profesora de dibujo geométrico, espero verlos también en la optativa- sonrió y empezó con su clase.

Luego de que sonara la campana mis hombros se relajaron un poco. Estaba tensa por causa del desconocido. Suspiré y miré a Laury.

-En serio me caes bien, ¿cuántos años tienes?- me preguntó

-¡Ah!, yo tengo 12- sus ojos grandes y brillantes se abrieron- ¿y tu?
-¿12 añitos? Qué tiernita estás, yo tengo 14 años, 10 meses y un día.
-Bien, espero que nos podamos llevar bien, pero, tengo una pregunta, no sé si deba…
-con confianza, dime.- me dijo mientras se acercaba.
Mis mejillas ya ardían.

-¿sabes quién es el chico de allá atrás mío?... no mires ahora-le dije.

-no, el es nuevo, llegó esta mañana, unos minutos antes que tú.

Así que era nuevo… tal vez ni siquiera era de esta ciudad, es más ni era de este planeta…alguien tan perfecto no puede ser real, pero Laury lo veía.

-¿Espera un momento, debo esperar al profesor o cambiarme de sala?- pregunté

-pues, a algunos los esperamos y algunos dan clases en sus laboratorios.

-¿y qué nos toca?- había perdido mi horario de clases y ni cuenta me dí.

-Química- respondió sonriendo.

El resto de las horas de clases antes del recreo nos quedamos en la sala, luego de que tocara el receso con Laury, bajamos hasta el comedor, donde pedimos el almuerzo y salimos de ese lugar. Laury era una chica muy agradable, y estuvo dispuesta a ayudarme en lo que necesitara. Le pedí que saliéramos al patio trasero para almorzar al aire libre y ella aceptó, cuando caminábamos hasta la salida sentí un golpecillo muy leve, casi como una caricia en mi hombro, me giré y vi un par de ojos turquesa… y luego, me temblaron las manos y dejé caer la bandeja.

3 comentarios:

  1. que buen capi nicuu...
    me ha gustado mucho... ya quiero leer el
    que sigue chika, espero que no demores... ¬¬
    bueno besotes
    nos leemos pronto
    xoxo... romii

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  2. Nicuu esta geniial :D
    siigue asi!!!
    y trata de no demorart con el otro :$
    besos
    xxx

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  3. oooooo
    q densooo
    quien y q es ese chavoo?
    densoooooo
    haha
    tk
    dios t bendiga

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